Tuesday, October 29, 2013

¡SIEMBRA, RIEGA Y SACÚDETE!

Leer: Parábola del sembrador: 
Mateo 13:1-9 (Mr. 4.1-9; Lc. 8.4-8)
Meditando en ciertas cosas esta mañana, vino a mi mente el tema de la deslealtad, y le pedí al Señor que me diera discernimiento suficiente para saber en donde sembrar, y en donde no colocar ninguna semilla, para así evitar el dolor de invertir en gente que, tarde o temprano, solo producirá decepción. Casi inmediatamente llegó la respuesta:
“¿Acaso en la parábola del sembrador se habla de que ese hombre fue selectivo al arrojar sus semillas? ¿Ves en algún lado de ese pasaje que el sembrador haya observado cierto lugar y dicho ˂aquí no siembro, aquí si, aquí no, y aquí si˃?”
En la parábola del sembrador vemos que solo una cuarta parte da frutos. Sabiendo esto, solo podemos tener dos reacciones:
1) La reacción pesimista (INCREDULIDAD): el que ve solo en el plano físico dice: ”Señor, ¿pero cómo que solo el 25% de lo que sembré me está dando frutos?, no es justo, estoy cansado de sembrar para solo ver producir la cuarta parte de la siembra”. Luego de esto, se deprime, llora y abandona el ministerio, por lo menos mientras se recupera de la decepción y la tristeza, si acaso logra recuperarse algún día.
2) La reacción optimista (FE): el que ve más allá de lo físico, a quien sus ojos espirituales han sido abiertos. Sabe que ese 25% dará cien veces más de lo esperado en todo lo que se sembró. No porque lo merezca, sino porque Dios así se glorifica a sí mismo. Esta clase de sembrador también se cansa, tiene momentos de desánimo, pero la diferencia es que esto no le impide perseverar y levantarse con la certeza de las promesas que ha recibido, no olvida que al Dios a quien le sirve cumplirá lo que le ha prometido.
¿QUÉ ES LO QUE DIOS ME HA ENCOMENDADO HACER?

 1) SEMBRAR Y REGAR:
Tu trabajo es sembrar y regar, del resto se encarga Dios. No puedes ser selectivo en tu trabajo, Dios te manda a sembrar en todo tipo de tierra, el que crezca o no la semilla depende de Dios. Si tu siembras y riegas debes tener paz, sea cuales sean los resultados. Y si no es así debes examinarte para determinar que puertas has abierto al estrés, al desánimo y a la culpabilidad.

Yo planté la semilla en sus corazones, y Apolos la regó, pero fue Dios quien la hizo crecer. No importa quién planta o quién riega, lo importante es que Dios hace crecer la semilla.El que planta y el que riega trabajan en conjunto con el mismo propósito. Y cada uno será recompensado por su propio arduo trabajo” 1 Corintios 3:6-8 

2) SACUDIRME EL POLVO:
La Biblia es bien clara en cuanto a que estamos llamados a predicar las Buenas Nuevas de salvación, pero también lo es en cuanto a no invertir más de lo necesario en personas que simplemente están cerradas a recibir la Palabra de Dios, ó a reconciliarse, en caso de estar apartados.

Creo que esto también podemos aplicarlo a la gente desleal, personas que nos han causado alguna herida y no muestran señales de arrepentimiento. Necesitamos sanar para seguir adelante. Mientras no nos desliguemos de esa situación simplemente no podremos tocar a la siguiente puerta con el gozo que merece el llevar el evangelio a otras personas.

 “»Si entran en un pueblo donde los reciben bien, coman todo lo que les ofrezcan. Sanen a los enfermos y díganles: “El reino de Dios ahora está cerca de ustedes”. 10 Pero si un pueblo se niega a recibirlos bien, salgan a las calles y digan: 11 “Nos limpiamos de los pies hasta el polvo de su ciudad para mostrar que los abandonamos a su suerte. Y sepan esto: ¡el reino de Dios está cerca!” Lucas 10:8-9
”Pero si en algún lugar se niegan a recibirlos o a escucharlos, sacúdanse el polvo de los pies al salir para mostrar que abandonan a esas personas a su suerte»” Marcos 6:11
“Luego los judíos provocaron a las mujeres religiosas influyentes y a los líderes de la ciudad, e incitaron a una turba contra Pablo y Bernabé, y los echaron de la ciudad.51 Así que ellos se sacudieron el polvo de sus pies en señal de rechazo y se dirigieron a la ciudad de Iconio.52 Y los creyentes se llenaron de alegría y del Espíritu Santo” Hechos 13:50-52
Para concluir te digo esto: la persona que mejor conoce y ha padecido la DESLEALTAD se llama Jesucristo. Él hoy te dice:
SIEMBRA EN TODO LUGAR, RIEGA CON PERSEVERANCIA, PERO TAMBIÉN SACÚDETE DE TAL MANERA QUE NI SIQUIERA QUEDE EL POLVO EN TUS PIES DE AQUELLOS QUE, POR VOLUNTAD PROPIA DECIDIERON TOMAR OTRO CAMINO.
Como dije al principio, no es una sugerencia, es una instrucción del Señor, dada a través de Su Palabra. Dios te bendiga!

Itala D'Ambrosio Silva


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ÉL PERDONA Y SANA TODO !!!


"Él perdona todos tus pecados y sana todas tus dolencias"

Salmos 103:3

Definitivamente, jamás entenderemos cuán grande y profundo es el amor de Dios hacia nosotros. En este corto versículo podemos ver dos de las muchas bendiciones que Él nos otorga cuando buscamos Su presencia:

1) Perdona TODOS nuestros pecados: el Señor es tan increíblemente compasivo que, incluso muriendo en la cruz, oró al Padre diciendo "Perdónalos, porque no saben lo que hacen". Puedes estar seguro que Él también te perdonará si vas ante Él con un corazón quebrantado y le confiesas tus pecados y tomas la decisión de aceptar la restauración que Él te ofrece.

"Entonces Jesús le dijo: Ni yo te condeno; vete, y no peques más" (Juan 8:11b)

2) Sana TODAS tus dolencias: no hay algo que la Sangre del Cordero de Dios no pueda sanar. Una vez que confesamos nuestros pecados, nos arrepentimos y aceptamos la cobertura que Él nos da, comienza un proceso de sanidad, y te garantizo por Su Palabra, que no habrá área de tu vida que no sea restaurada y multiplicada si sigues sus indicaciones.   

Job 42:10,12a "Y quitó Jehová la aflicción de Job...; y aumentó al doble todas las cosas que habían sido de Job" "Y bendijo Jehová el postrer estado de Job más que el primero"


Recuerda: el sacrificio que Jesús hizo por ti te habilita para llevar TODOS tus pecados y TODAS tus dolencias a la Cruz. El Señor hizo la parte más difícil, tu parte es rendirte delante de Él y seguirle a donde sea que Él desee llevarte. Puedo garantizarte que jamás te arrepentirás !

Dtb!
28/10/13
Itala D'Ambrosio Silva

Sunday, August 4, 2013

UNA INTERCESIÓN QUE MUEVE LA MANO DE DIOS

UNA INTERCESIÓN QUE MUEVE LA MANO DE DIOS
 
Y ustedes nos están ayudando al orar por nosotros. Entonces mucha gente dará gracias porque Dios contestó bondadosamente tantas oraciones por nuestra seguridad” (2Corintios 1:11)
 
Interceder es colocarse en el lugar de otra persona y clamar a Dios con todo nuestro ser, con pasión y profunda compasión. Nuestro mayor ejemplo es Jesús, quién se colocó en nuestro lugar en la cruz y ahora está a la diestra del Padre en constante intercesión por nosotros (Romanos 8:34).
 
La intercesión no es algo que debo hacer por imposición, sino que siento hacer, y ese sentir se hará más frecuente y más fuerte en la medida que yo me acerco más a Dios. Cuando estoy conectado al corazón de Dios automáticamente el Espíritu Santo me llevará a un plano espiritual más alto, en donde veré la necesidad de otros como si fuese mía, y allí se manifestará el poder de Dios con cada palabra pronunciada en oración.  
 
La intercesión no es algo que debo cronometrar, su efectividad no se mide por el número de horas o minutos que dispongo para hacerlo. En mi experiencia personal, puedo decir que he podido asombrarme de ver como Dios ha respondido a una intercesión en la que tal vez duré 10 minutos pero fue una oración que salió de lo más profundo de mi corazón.
 
Cuando intercedas por alguien trata de colocarte en el lugar de esa persona, pídele a Dios que te muestre su corazón, que te haga entender la situación por la que está pasando, que te muestre su dolor, el peligro que pudiera estar corriendo, qué trampas está colocando el enemigo en su camino, y pídele también que te muestre cómo interceder para que esa persona sea sanada y protegida en todas las áreas de su vida.

Todos necesitamos que intercedan por nosotros, para eso pertenecemos al Cuerpo de Cristo que es Su iglesia, no dudemos en buscar el soporte de nuestros líderes espirituales y miembros de la iglesia que sabemos podrían interceder de una manera especial por nosotros delante de Dios.
 
“Señor, hoy te pido con todo mi corazón que abras mis ojos espirituales, muéstrame lo que tú ves, hazme pensar como tú piensas, permíteme sentir lo que tú sientes por cada persona por la que voy a interceder de ahora en adelante, para así poder brindar la ayuda que ellos necesitan, dame el privilegio de ver tus milagros en ellos a través de mi intercesión. Y protégeme de cualquier retaliación que venga de parte del enemigo, porque sé que vendrá a tratar de detener el propósito que tienes con mi vida. Que sea tu Espíritu actuando a través de mí y protegiéndome de todo mal. Te lo pido en el Nombre de Jesús! Amén”
 
Itala D´Ambrosio S.
04/08/2013

Wednesday, July 24, 2013

¿BENDICIÓN ETERNA Ó ALEGRÍA PASAJERA?




“»Oh Dios mío, me he atrevido a elevarte mi oración porque has revelado a tu siervo que construirás una casa para él, ¡una dinastía de reyes! Pues tú eres Dios, oh Señor, y le has prometido estas cosas buenas a tu siervo. Ahora te ha complacido bendecir la casa de tu siervo para que permanezca para siempre delante de ti. ¡Pues cuando tú concedes una bendición, oh Señor, es una bendición eterna!».(1 Crónicas 17:25-27)

Leyendo esta oración que hizo el rey David, me hizo meditar en lo que proviene de Dios y lo que proviene del mundo en el cual estamos viviendo, en donde la mentira, el egocentrismo y la maldad en general pareciera cobrar más y más fuerza con el pasar de los días.

Lo que proviene de Dios es descrito por el rey David como una “BENDICIÓN ETERNA”, un beneficio completo y sin límites en tiempo ni espacio. Lo que proviene del mundo es una “ALEGRÍA PASAJERA”. Lamentablemente, al ser humano le es más fácil, y mucho más placentero, ir detrás de esa alegría temporal, que determinarse a luchar por la bendición que proviene de Dios.

Por nuestra misma naturaleza pecaminosa, diariamente se nos presentan retos, pruebas y tentaciones que debemos enfrentar y vencer para acercarnos a esa meta llamada “bendiciones”. Y esta lucha diaria, sin el debido alimento espiritual, puede llevarnos a un estado de agotamiento extremo que nos haga optar, en determinado momento, por una salida fácil, que desafortunadamente solo traerá decepción y dolor a nuestras vidas.

Semanalmente recibo un devocional del website Biblegateway llamado “Questions Answered” (Preguntas Respondidas), y la pregunta a la que respondieron esta semana fue: “¿Dios cambia de opinión?”.

¿Alguna vez te has preguntado eso? ¿Será que Dios se arrepintió de lo que me prometió?

En ese estudio de “Questions Answered” explican la posición de Dios con dos pasajes bíblicos:

Oseas 11: 8-11
»Oh, Israel, ¿cómo podría abandonarte? ¿Cómo podría dejarte ir? ¿Cómo podría destruirte como a Adma o demolerte como a Zeboim? Mi corazón está desgarrado dentro de mí y mi compasión se desborda. No, no desataré mi ira feroz. No destruiré por completo a Israel, ya que no soy un simple mortal, soy Dios. Yo soy el Santo que vive entre ustedes y no vendré a destruir. Pues algún día la gente me seguirá. Yo, el Señor, rugiré como un león. Y cuando ruja, mi pueblo regresará temblando del occidente. Vendrán de Egipto como una bandada de aves. Regresarán de Asiria temblando como palomas y los traeré de regreso a casa», dice el Señor.

La intención de Dios siempre ha sido BENDECIR a su pueblo, su corazón se desgarra cada vez que nuestra propia actitud le impide darnos lo que nos prometió. Cada vez que nos alejamos de Su Presencia herimos su corazón, muchas veces preferimos hacer mil cosas antes de orar, de tener ese tiempo devocional con el Espíritu Santo, de congregarnos, de hablar de Él a otras personas que sabemos lo necesitan tanto como nosotros. Todo esto lo hiere, sin embargo, Él no es un ser humano, Él es Dios, y estará allí esperando que volvamos a sus brazos con un corazón humilde y humillado delante de Él.

El segundo pasaje se encuentra en Jeremías 18:5-10

“Después el Señor me dio este mensaje:«¡Oh, Israel! ¿No puedo hacer contigo lo mismo que hizo el alfarero con el barro? De la misma manera que el barro está en manos del alfarero, así estás en mis manos. Si anuncio que voy a desarraigar, a derribar y a destruir a cierta nación o a cierto reino, pero luego esa nación renuncia a sus malos caminos, no la destruiré como lo había planeado. Y si anuncio que plantaré y edificaré a cierta nación o a cierto reino, pero después esa nación hace lo malo y se niega a obedecerme, no la bendeciré como dije que lo haría.

¿Después de este pasaje en Jeremías 18, podríamos pensar que Dios no tiene una idea clara de cómo va a distribuir sus bendiciones? Definitivamente no. Dios está absolutamente claro de sus planes para la humanidad. Si Dios te da una advertencia de cómo Él desea que vivas (ese consejo viene a través de varias vías: la Biblia, la oración, tus líderes espirituales, el mensaje predicado). Si y solo sí aceptamos sujetarnos a sus requerimientos, Él de seguro nos concederá los deseos de nuestro corazón que estén dentro de Su voluntad para nuestra vida.

A veces creemos que nos merecemos todo lo bueno que Dios nos ha prometido, pero no perseveramos en serle fiel, y yo me pregunto: ¿Qué fidelidad y qué bendición le estamos reclamando a Dios, si ni siquiera somos capaces de mantener un devocional diario con ÉL? ¿Acaso nos merecemos todo de Su parte y Él no es digno de por lo menos 30 minutos diarios de las 24 horas que nos está regalando en un día?

Solo me queda preguntar: ¿Por qué lucharás? ¿Irás a conquistar tu Bendición eterna con toda la valentía y perseverancia que eso implica? ¿O te conformarás con una alegría pasajera que solo te alejará del bienestar que realmente deseas para tí y para los seres que amas?

Comparto la oración que hizo el rey David en una etapa crucial de su vida:

Salmo 51:

“Ten misericordia de mí, oh Dios,  debido a tu amor inagotable; a causa de tu gran compasión, borra la mancha de mis pecados. Lávame de la culpa hasta que quede limpio y purifícame de mis pecados. Pues reconozco mis rebeliones; día y noche me persiguen. Contra ti y sólo contra ti he pecado; he hecho lo que es malo ante tus ojos. Quedará demostrado que tienes razón en lo que dices y que tu juicio contra mí es justo.

Purifícame de mis pecados, y quedaré limpio; lávame, y quedaré más blanco que la nieve. Devuélveme la alegría; deja que me goce ahora que me has quebrantado.

Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio y renueva un espíritu fiel dentro de mí. No me expulses de tu presencia y no me quites tu Espíritu Santo. Restaura en mí la alegría de tu salvación y haz que esté dispuesto a obedecerte. Entonces enseñaré a los rebeldes tus caminos, y ellos se volverán a ti.

Desata mis labios, oh Señor, para que mi boca pueda alabarte.
Tú no deseas sacrificios; de lo contrario, te ofrecería uno. Tampoco quieres una ofrenda quemada. El sacrificio que sí deseas es un espíritu quebrantado; tú no rechazarás un corazón arrepentido y quebrantado, oh Dios”


Dios les bendiga!
By Itala D´Ambrosio S.
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Friday, July 12, 2013

DIVISIÓN: LA OPERACIÓN MATEMATICA FAVORITA DE SATANÁS


Me llamó la atención una definición de división que encontré en internet: dice que la división es “una operación de la aritmética donde se descompone una cifra”. Y básicamente eso causa la división en la iglesia, una descomposición del cuerpo de Cristo. Es por esto que quise reflexionar en el siguiente versículo:

“Incluso algunos hombres de su propio grupo se levantarán y distorsionarán la verdad para poder juntar seguidores” (NTV) Hechos 20:30

Lamentablemente esta experiencia ya la hemos vivido en varias oportunidades dentro de la iglesia. Gente a quien una vez se le extendió la mano cuando estuvieron en crisis, y que posteriormente, no solo se levantaron en rebeldía, sino que arrastraron con ellos discípulos que se formaron en la iglesia y en donde tenían un llamado específico.

Por supuesto que la división que causan estas personas en el Cuerpo de Cristo trae tristeza y dolor al liderazgo y a quienes una vez les consideraron gente de confianza. Pero quiero resaltar hoy lo que dijo Pablo unos versículos antes, en este mismo capítulo:
Declaro hoy que he sido fiel. Si alguien sufre la muerte eterna, no será mi culpa, porque no me eché para atrás a la hora de declarar todo lo que Dios quiere que ustedes sepan” Hechos 20:26-27

Lo más importante es que cada uno de nosotros podamos analizarnos y estar satisfechos de que hicimos todo lo posible por exhortar y enseñar tal y como la Biblia indica. Y si aún así, hay personas que desean dividir y otros que desean irse sin cobertura, entonces es mejor ayudarlos a levar anclas y que sus barcas zarpen hoy, y no mañana.

Fíjese en algo: podar implica un proceso de recortar, de quitar, pero este “recorte” trae posteriormente un incremento en el rendimiento del fruto que realmente sirve (http://es.wikipedia.org/wiki/Poda). Así que, no pensemos tanto en el “recorte”, sino en el “rendimiento” que vendrá.

Y ahora, mis amados hermanos, les pido algo más. Tengan cuidado con los que causan divisiones y trastornan la fe de los creyentes al enseñar cosas que van en contra de las que a ustedes se les enseñaron. Manténganse lejos de ellos. Tales personas no sirven a Cristo nuestro Señor; sirven a sus propios intereses. Con palabras suaves y halagos, engañan a la gente inocente; pero todos saben que ustedes son obedientes al Señor. Eso me llena de alegría. Quiero que sean sabios para hacer lo que está bien y sigan siendo inocentes en cuanto a toda clase de mal. El Dios de paz pronto aplastará a Satanás bajo los pies de ustedes. Que la gracia de nuestro Señor Jesús[g] sea con ustedes” Romanos 16:17-20

Así que estén alerta. Recuerden que día y noche, durante tres años, no he dejado de amonestar con lágrimas a cada uno en particular. »Ahora los encomiendo a Dios y al mensaje de su gracia, mensaje que tiene poder para edificarlos y darles herencia entre todos los *santificados” Hechos 20:31-32

Dios les bendiga!
Itala D´Ambrosio S.

¿SOY DIGNO DE CONFIANZA?

¿SOY DIGNO DE CONFIANZA?


“No fue necesario pedir cuentas de este dinero a los supervisores de la construcción, porque eran hombres honestos y dignos de confianza” (2 Reyes 12:15)

Este versículo trae a mi memoria a un antiguo jefe, a quien yo trataba de rendirle cuentas de todo el movimiento de efectivo (pagos especialmente), que hacía desde las cuentas bancarias de su empresa, y ante mi insistencia de que supervisara mi trabajo me dijo: “te di acceso a mis cuentas bancarias porque te conozco y sé que serías incapaz de robarme, confío más en ti que en mi propia hermana”.

El ser dignos de confianza es un honor que llena de gozo, que da un ánimo indescriptible, pero también es una gran responsabilidad. La confianza no se exige, se gana; no se mendiga, se compra a precio de honestidad, de integridad, de deseos de querer hacer las cosas bien.

Hay un concepto que se conoce en la vida cristiana, pero que lamentablemente muy poca gente practica, y es la MAYORDOMÍA. El apóstol Pedro, nos dice que todos los cristianos somos administradores de la multiforme gracia de Dios” (1 Pedro 4: 10)

Un mayordomo es aquella persona a quien el dueño deja a cargo porque confía en que cuidará sus bienes como si fueran suyos, aunque está consciente de que no lo son. (Lucas 12:35-48). Dios es el dueño y señor de todo lo que somos y tenemos, y nos ha puesto como mayordomos de su creación.

Un ejemplo bíblico de mayordomía es José:
El Señor estaba con José, por eso tenía éxito en todo mientras servía en la casa de su amo egipcio.Potifar lo notó y se dio cuenta de que el Señor estaba con José, y le daba éxito en todo lo que hacía.Eso agradó a Potifar, quien pronto nombró a José su asistente personal. Lo puso a cargo de toda su casa y de todas sus posesiones. Desde el día en que José quedó encargado de la casa y de las propiedades de su amo, el Señor comenzó a bendecir la casa de Potifar por causa de José. Todos los asuntos de la casa marchaban bien, y las cosechas y los animales prosperaron. Pues Potifar le dio a José total y completa responsabilidad administrativa sobre todas sus posesiones. Con José a cargo, Potifar no se preocupaba por nada, ¡excepto qué iba a comer!” (Génesis 39:2-6)

Ha colocado en nuestras manos una familia, una iglesia, e incluso nuestro propio cuerpo, que es el templo y la morada de Su Espíritu.

Una de las áreas que muy pocas veces tomamos en cuenta es la física, el cuidado de nuestro cuerpo, que es en donde habita el Espíritu Santo. Cuántas veces nos hemos desvelado orando y reprendiendo enfermedad y cansancio, cuando, generalmente, lo que hay que echar fuera son los malos hábitos a los que nosotros mismos nos hemos acostumbrado (mala alimentación, pocas horas de descanso, cero actividad física). Este es un asunto en el que Satanás nada tiene que ver, más bien es una cuestión de poner en práctica el “dominio propio” que se supone ahora tenemos: “Pues Dios no nos ha dado un espíritu de temor y timidez sino de poder, amor y autodisciplina.” (2 Timoteo 1:7)

Otra de las áreas que parece no ser importante para algunas personas es el cuidado y mantenimiento de los recursos que Dios nos ha dado a administrar dentro de la iglesia. La primera vez que tuve la oportunidad de predicar (en un taller de homilética dado por nuestro pastor Miguel Osuna), hablé de esta área de la mayordomía, y reflexionaba lo siguiente: “¿de qué me sirve dar una ofrenda de Bs.50,oo si le generó a la iglesia un gasto de Bs.100,oo? Porque exactamente eso hago cuando dejo luces y equipos electrónicos encendidos, cuando ingiero alimentos en áreas restringidas y mancho alfombras y sillas, cuando daño un objeto y no tengo la voluntad y el sentido común de confesarlo y reponerlo. Todo eso genera un gasto, la pregunta es ¿un buen mayordomo genera gastos? NO, la Biblia enseña que un mayordomo no solo cuida, sino que multiplica los bienes del dueño, que en este caso es DIOS. (ver la vida de José – Gen 39)

¿Qué estamos haciendo con todo lo que el DUEÑO colocó en nuestras manos? ¿Lo estamos cuidando y multiplicando? ¿Qué clase de mayordomos somos?

Medita en esto: ¿acaso yo demuestro con mis ACCIONES que soy una persona digna de confianza?

Mateo 25:29 “A los que usan bien lo que se les da, se les dará aún más y tendrán en abundancia; pero a los que no hacen nada se les quitará aun lo poco que tienen”

Dios les bendiga

Itala D´Ambrosio Silva
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09/07/2013


Friday, March 29, 2013

¿EN QUÉ GRUPO ESTÁS?


Mateo 26:36-38

"36 Entonces Jesús fue con ellos al huerto de olivos llamado Getsemaní y dijo: «Siéntense aquí mientras voy allí para orar». 37 Se llevó a Pedro y a los hijos de Zebedeo, Santiago y Juan, y comenzó a afligirse y angustiarse. 38 Les dijo: «Mi alma está destrozada de tanta tristeza, hasta el punto de la muerte. Quédense aquí y velen conmigo»."

He conocido personas que en tiempos de angustia reaccionan de distintas maneras, los he dividido en tres grupos:

1) Los auto-suficientes: es el grupo de personas que, a pesar de estar atravesando una crisis bastante fuerte, tratan de aparentar que todo está bien. Si ocupan una posición de autoridad (ya sea en la familia, trabajo o ministerio) y les preguntas cómo se sienten, te responderán que están muy bien y, de manera inmediata, te devolverán la pregunta con una sonrisa para complementar la careta de "estoy muy bien". 

Son el tipo de personas que ni siquiera buscan ayuda entre sus mejores amigos, por considerarlo un símbolo de debilidad o perdida de autoridad entre los que le rodean. Sin embargo, aunque no lo digan, rara vez pasa desapercibida su situación.

2) Los auto-compasivos: todo lo contrario a los auto-suficientes. Este grupo se desviven en manifestar cuán indefensos están en este mundo. Piden ayuda hasta para respirar, hablan de si mismos como que si fueran los nuevos mártires de este siglo. Van contándole sus problemas a todos los que se consiguen en el camino, y rara vez siguen un buen consejo. "Nadie me comprende" "¿Por qué me pasa esto a mi?" "Dios no me escucha" son frases típicas de este grupo de personas. 
Se toman muy en serio el papel de víctima, y rechazan a todo aquel que les diga "cambia tu actitud, tu puedes salir adelante" porque consideran que ellos no tienen parte de culpa en el problema que atraviesan. Cualquier persona es culpable menos ellos. 

3) Los honestos con sabiduría: este último grupo es, definitivamente, el que debe quedar arraigado en su carácter, y es el tipo de personas que ante una situación de dificultad se comportan como Jesús lo hizo en el pasaje que leímos al principio. Jesús fue honesto, él reconoció su dolor delante de Dios, de sí mismo y de sus mejores amigos (que también eran discípulos), Jesús no escatimó en expresar sus sentimientos, su angustia, su tristeza, pero lo hizo ante personas que consideraba sus amigos, ante la gente más cercana y la que él consideraba de confianza, personas que lo amaban. Allí entra la sabiduría que también debemos manejar.


Jesús fue totalmente honesto pero también sabio. Si usted está en el primer grupo, aprenda a apoyarse en la gente que lo ama y desea lo mejor para usted, gente que puede darle un consejo digno de ser escuchado y seguido. 

Si por el contrario está en el segundo grupo, aprenda a meditar en qué debe aprender de esa situación y en qué grado es usted el culpable de ese problema para que no vuelva a incurrir en el mismo error en el futuro, no cuente sus problemas a todo el mundo, solo a aquellas personas que realmente pueda ayudarlo a edificar sobre las ruinas.       

En conclusión, independientemente del problema que estés atravesando, pregúntate: ¿Si Jesús estuviera en mi lugar qué haría?, y luego vuelve a leer Mateo 26:36-38.

Dios les bendiga!

Itala D'Ambrosio S.
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Sunday, March 3, 2013

¡LA PUERTA MISMA DEL CIELO!

Génesis 28:
15: Además, yo estoy contigo y te protegeré dondequiera que vayas. Llegará el día en que te traeré de regreso a esta tierra. No te dejaré hasta que haya terminado de darte todo lo que te he prometido».
16: Entonces Jacob se despertó del sueño y dijo: «¡Ciertamente el SEÑOR está en este lugar, y yo ni me di cuenta!»; 17: pero también tuvo temor y dijo: «¡Qué tan temible es este lugar! No es ni más ni menos que la casa de Dios, ¡la puerta misma del cielo!»


Estos versículos nos hablan de una promesa de parte de Dios a Jacob (hijo de Isaac y nieto de Abraham). En ellos vemos el amor y la ternura con la que Dios cuida de aquellos que claman a Él con un corazón sincero, un Dios que perdona y bendice a los que vuelven a su Casa, que protege y respalda sin importar la vida que hayan llevado en el pasado.

Por otra parte, vemos a un hombre, que habiendo cometido muchos errores por querer hacer las cosas a su conveniencia, entiende que el único camino para lograr sus sueños es rendirse a Dios, dándose cuenta que sin Él de nada ha valido lo que ha conseguido fuera de su voluntad, y finalmente logra identificar la "casa de Dios" y el gran privilegio que se le ha dado en habitarla. Identificándola como ¡la puerta misma del cielo!


Reflexión:


1- Has sido invitado a la Casa de Dios y no has tenido tiempo de ir? Date cuenta hoy de que en ella habita Dios mismo, y Él es el único que te protegerá donde quiera que vayas.


2- Has tenido la oportunidad de estar en la Casa de Dios pero te has alejado de ella? Dios te dice hoy: "Regresa a mi casa, porque aun tengo un lugar con tu nombre reservado en mi mesa, ven y date cuenta que mis promesas se cumplirán en ti a medida que te acerques a Mi"

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Señor, hoy me doy cuenta que sin ti no hay espacio totalmente lleno, no hay actividad completamente exitosa, no hay relación cien por ciento fiel. Sin ti hay solo alegrías pasajeras, hay música sin gozo y conocimiento sin sabiduría. Ayúdame Señor, a buscar de tu presencia en todo tiempo y no dejarme seducir por los afanes del diario vivir. Ayúdame a enfrentar mis temores y siempre confiar que Tu me protegerás dondequiera que yo vaya. Fortalece mi fe y alimenta mi esperanza para que ninguna dificultad, prueba o tentación me alejen de los planes de bienestar que ya tienes escritos para mi y para mi familia. En el nombre de Jesús. Amén! 

Itala DAmbrosio S.











Sunday, February 17, 2013

AGRADECIDO / THANKFUL !


11 Luego me dijo: «Hijo de hombre, estos huesos representan al pueblo de Israel. Ellos dicen: “Nos hemos vuelto huesos viejos y secos; hemos perdido toda esperanza. Nuestra nación está acabada”.12 Por lo tanto, profetiza y diles: “Esto dice el Señor Soberano: ‘Oh pueblo mío, abriré las tumbas del destierro y haré que te levantes. Luego te regresaré a la tierra de Israel. 13 Cuando eso suceda, pueblo mío, sabrás que yo soy el Señor. 14 Pondré mi Espíritu en ti, volverás a vivir y regresarás a tu propia tierra. Entonces sabrás que yo, el Señor, he hablado y que he cumplido mi palabra. ¡Sí, el Señor ha hablado!’”». Ezequiel 37:11-14¡Gracias Señor! Porque sin ti yo sería como esa gente que sentían ser huesos secos, sin fe con la cual alimentarse, sin esperanza por la cual perseverar, y sin fuerzas con que luchar por sus bendiciones.

Tú has prometido ser mi luz y mi salvación, eres quien me protege del peligro y derrotas a los que intentan hacerme mal, por eso viviré confiado en que veré tu bondad mientras viva, porque cada vez que te busco tú estás allí, y siempre estarás.  Líbrame de causar tristeza a tu corazón porque tu mereces todo mi amor y fidelidad. Amén


El Señor es mi luz y mi salvación, entonces ¿por qué habría de temer?. El Señor es mi fortaleza y me protege del peligro,  entonces ¿por qué habría de temblar?  Cuando los malvados vengan a devorarme, cuando mis enemigos y adversarios me ataquen,  tropezarán y caerán. Aunque un ejército poderoso me rodee,  mi corazón no temerá. Aunque me ataquen, permaneceré confiado. Salmo 27


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11 Then he said to me, “Son of man, these bones represent the people of Israel. They are saying, ‘We have become old, dry bones—all hope is gone. Our nation is finished.’ 12 Therefore, prophesy to them and say, ‘This is what the Sovereign Lord says: O my people, I will open your graves of exile and cause you to rise again. Then I will bring you back to the land of Israel. 13 When this happens, O my people, you will know that I am the Lord. 14 I will put my Spirit in you, and you will live again and return home to your own land. Then you will know that I, the Lord, have spoken, and I have done what I said. Yes, the Lord has spoken!’” Ezekiel 37:11-14


Thank you Lord! Because without you I would be like those people who felt as dry bones, without faith to feed themselves, without hope to persevere, and without strength to fight for their blessings.You've promised to be my light and my salvation, you are who protect me from danger and make evil people to stumble and fall, that´s why I´ll trust you all my life, I'll see your kindness while alive, because whenever I look for you, You´ll be there, and always will be. Deliver me from causing you sadness, because You deserve all my love and faithfulness. Amen

The Lord is my light and my salvation— so why should I be afraid? The Lord is my fortress, protecting me from danger, so why should I tremble? When evil people come to devour me, when my enemies and foes attack me, they will stumble and fall. Though a mighty army surrounds me, my heart will not be afraid. Even if I am attacked, I will remain confident” Psalm 27