TRES FORMAS DE VER EL DIEZMO:
DIEZMO: Décima
parte de lo que recibes de parte de Dios (salario, inversiones, regalos, premios,
etc). Le devuelves a Dios solo 10% del 100% que de antemano te da.
Tres recomendaciones para habituarte a DIEZMAR
y recibir las bendiciones que estás esperando:
1) Mira
el DIEZMO como una PRIMICIA: las primicias son las primeras ganancias
que produce una actividad. Piensa que el primer 10% de tu ganancia debe ser
apartado y entregado a Dios antes de cancelar cualquier otro compromiso en tu casa.
Porque al final es Dios quien te provee, Él es la primera persona con la que
debes quedar bien.
Abraham fue uno de los hombres más
prósperos de la Biblia y es un gran ejemplo de esta práctica:
“Después
Abraham tomó la décima parte de todo lo que había capturado en la batalla y se
la dio a Melquisedec. El nombre Melquisedec significa «rey de justicia», y rey
de Salem significa «rey de paz»” Hebreos 7:2
2) Mira
el DIEZMO como un MANDATO:
Ciertamente es un mandato y no una
opción. De hecho, la Biblia dice que no diezmar significa que estamos estafando
a Dios:
“» ¿Debería el pueblo estafar a
Dios? ¡Sin embargo, ustedes me han estafado! »Pero ustedes
preguntan: “¿Qué quieres decir? ¿Cuándo te hemos estafado?” »Me han robado los
diezmos y ofrendas que me corresponden” Malaquías 3:8
“Si
escuchas los mandatos del Señor tu
Dios que te entrego hoy y los obedeces cuidadosamente, el Señor te pondrá a la cabeza y no en la
cola, y siempre estarás en la cima, nunca por debajo” Deuteronomio 28:13
3) Mira
el DIEZMO como un ACTO INTEGRAL:
Nuestro
testimonio no se limita a un par de acciones, sino más bien a un gran conjunto
de ellas, no solo necesito ser obediente al diezmar, también debo tener la
actitud correcta en todas las áreas de mi vida. ¿De qué manera cree usted que
Dios me va a bendecir si fielmente traigo mis diezmos a la iglesia pero estoy aceptando
sobornos en el trabajo, mintiendo para conseguir lo que necesito, ó tal vez veo
a una persona en gran necesidad y pudiendo ayudarla me hago el desentendido?
No
podemos ser cristianos para unas cosas y para otras no. Dios jamás nos ha dado
la opción de dar buen testimonio en algunas situaciones y en otras no. Si usted
encuentra esa opción en la Biblia por favor compártala conmigo. En conclusión,
si diezmo pero tengo actitudes incorrectas necesito arrepentirme, y si tengo buen
testimonio con la gente a mi alrededor pero no diezmo, también necesito
arrepentirme, porque estoy en desobediencia al mismo JESUCRISTO.
Para
los que han creido a esos estudios en internet que dicen que el diezmo solo se
practicaba en el Antiguo Testamento acá
les dejo Mateo 23:23 para rasgar ese velo por completo:
“¡Qué aflicción les espera,
maestros de la ley religiosa y fariseos! ¡Hipócritas! Pues se cuidan de dar el
diezmo sobre el más mínimo ingreso de sus jardines de hierbas, pero pasan por
alto los aspectos más importantes de la ley: la justicia, la misericordia y la
fe. Es cierto que deben diezmar, pero sin descuidar las cosas más
importantes” Mateo 23:23
Leí
en un sitio web una frase que decía “Dios es mi socio”, y reflexionando en
ella, llegué a la conclusión de que yo, bajo ningún concepto deseo que Dios sea
mi socio, yo quiero y le pido a Dios que sea el “Gerente General-Dueño-Presidente”
y todo cargo que implique que yo esté bajo sus órdenes, porque las mejores instrucciones
para mi bienestar me las dará Él, y una de claves que me dio para obtener éxito
fue: ¡DIEZMA!
“Traigan todos los diezmos al depósito del
templo, para que haya suficiente comida en mi casa. Si lo hacen —dice el Señor de los Ejércitos Celestiales—, les
abriré las ventanas de los cielos. ¡Derramaré una bendición tan grande que no
tendrán suficiente espacio para guardarla! ¡Inténtenlo! ¡Pónganme a prueba!”
Malaquías 3:10
God
bless…
No comments:
Post a Comment